{"id":120113,"name":"AMOR CR\u00d3NICO"}

[{"id":122869,"title":"AMOR CR\u00d3NICO","description":"Chris Frantz, baterista y cofundador de los Talking Heads, conoci\u00f3 a David Byrneen la Escuela de Dise\u00f1o de Rhode Island a principios de los setenta. Juntos y de la mano de la bajista y futura esposa de Frantz, Tina Weymouthtransmutar\u00edanse en los afamados bustos parlantes, triunvirato al que, con el tiempo, se sumar\u00eda el ya muy curtido en estas lides y cuarto en discordia, Jerry Harrison. Entre los vestigios industriales del Lower East Side de Manhattan, compartiendo escenograf\u00eda vital con ilustres luminarias y la fauna m\u00e1s diversa Patti Smith, William Burroughs y otros despojos del emergente protopunk, iba a fijar su residencia el cuarteto llamado a surfear en la cresta de la new wave. Y, como quien no quiere la cosa, alentados por la creciente secta que acud\u00eda a todos sus bolos en el tugurio, por antonomasia, del momento, CBGB junto a los Ramones, Televisiony Blondie, se arm\u00f3 la horda.\n\nLos innovadores desmanes de los Talking Heads llegar\u00edan a o\u00eddos de Warhol y Lou Reed, y el exc\u00e9ntrico cuarteto firmar\u00eda al poco, aupado por tan ilustres mentores, con Sire Records. La m\u00fasica de baile para gente con cabeza hac\u00eda parcialmente suyas tanto las m\u00e1s rudas convulsiones del punk formativo m\u00e1s minimalista como otras sonoridades (\u00abPsycho Killer\u00bb, \u00abBurning Down the House\u00bb, \u00abOnce in a Lifetime\u00bb) que trascend\u00edan, a la manera de los Clashtoda proporci\u00f3n guardada, las evidentes limitaciones del punk. Haciendo caso omiso de los m\u00e1s funestos augurios reservados para los disturbios conceptuales de la escena indie, sus primeros \u00e1lbumes se convirtieron r\u00e1pidamente en cl\u00e1sicos; tras los que, con la controvertida y egoc\u00e9ntrica participaci\u00f3n de Brian Eno en Remain in Light, iniciaron su vertiginosa ascensi\u00f3n al estrellato. Pronto, sin embargo, las relaciones empezaron a tensarse por cortes\u00eda del crecido cantor. A ra\u00edz de esos desencuentros, Chris y Tina empezaron a trabajar en su propio proyecto, Tom Tom Club; dando con una hibridaci\u00f3n de funk, disco, pop, electro y otras m\u00fasicas ajenas al canon occidental que tendr\u00eda gran impacto en la indolente geograf\u00eda clubera.\n\nFrantz traza el ascenso y declive de una banda, a lo largo de una d\u00e9cada en la que sentar\u00edan las bases del vitalista sonido de la nueva ola, pero nos brinda tambi\u00e9n la cr\u00f3nica de la historia de amor y la asociaci\u00f3n art\u00edstica con Tina, acaso una de las mejores secciones r\u00edtmicas impelidas por el noble empe\u00f1o de electrificar, con cabeza, la escena del pop ochentero m\u00e1s ecl\u00e9ctico y bailable.","currency_symbol":"UYU","price":"1.290","is_offer":0,"old_price":"0","stock":"4.000","sizeChartFileURL":"","files":[{"height":2000,"width":1259,"file_type_id":1,"url":"\/files\/tmp\/uncompressed\/bhgr68nfrkc70q6w1ahz.jpg","thumbnail_url":"\/files\/tmp\/uncompressed\/bhgr68nfrkc70q6w1ahz.jpg"}],"specIds":["",""],"badgeFileUrl":"","customizableFields":[]}]

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