{"id":97733,"name":"EL VIENTO COMENZ\u00d3 A MECER LA HIERBA"}

[{"id":101204,"title":"EL VIENTO COMENZ\u00d3 A MECER LA HIERBA","description":"Emily Dickinson fue una mujer inteligente, rebelde y culta que, en su encierro voluntario en la habitaci\u00f3n de su casa en Amherst, construy\u00f3 una de las obras m\u00e1s s\u00f3lidas de la literatura universal.\nComo se\u00f1ala Juan Marqu\u00e9s en la presentaci\u00f3n, sus poemas \u00abadem\u00e1s de ser escritos, en principio, exclusivamente para la inmensa minor\u00eda de s\u00ed misma, fueron, a un tiempo, complicad\u00edsimos y simples, alegres y tristes, transparentes y enigm\u00e1ticos. Son poemas que acompa\u00f1an y ayudan a vivir a quien los lee, que ense\u00f1an a observar mejor, que obligan a ser m\u00e1s compasivo\u00bb.\nAunque su obra es muy extensa, hemos preferido editar un libro peque\u00f1o, \u00edntimo, dickinsoniano, para lo que ha sido fundamental la visi\u00f3n po\u00e9tica de las ilustraciones de Kike de la Rubia.\n\n\u00abNo hay, que yo sepa, una vida m\u00e1s apasionada y m\u00e1s solitaria que la de esta mujer. Prefiri\u00f3 so\u00f1ar el amor y acaso imaginarlo y temerlo.\u00bb","currency_symbol":"UYU","price":"890","is_offer":0,"old_price":"0","stock":"70.000","sizeChartFileURL":"","files":[{"height":1083,"width":750,"file_type_id":1,"url":"\/files\/tmp\/uncompressed\/7wso16pcdsnvvltuyknr.jpg","thumbnail_url":"\/files\/tmp\/uncompressed\/7wso16pcdsnvvltuyknr.jpg"}],"specIds":["",""],"badgeFileUrl":"","customizableFields":[]}]

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