Escritura
Tienes un e-mail
Por María Eugenia Martínez / Jueves 29 de junio de 2023
Lector de Escaramuza:
Te escribo hoy para que hablemos de los correos de trabajo y de las cartas formales. Me voy a apoyar en lo que recomienda la Real Academia Española en su Ortografía y en su Libro de Estilo.
El primer consejo es que no empieces un correo (mucho menos una carta) con un «Buenos días» o «Buenas tardes». Es muy probable que tu lector esté en otro momento del día cuando lo lea y que esa diferencia cree una distancia, sea como un ruido innecesario en la comunicación.
Dice la Real Academia Española en su Libro de Estilo: «Suelen evitarse expresiones que hacen referencia al momento del día (como buenas tardes), pues el correo puede ser leído en cualquier otro momento o incluso días después».
¿Qué pasa con la información del lugar y la fecha? En los correos no es necesaria. En las cartas se coloca alineada a la derecha y va sin punto de cierre.
Recordemos que los meses van con minúscula y que el cero a la izquierda no tiene ningún valor. No lo pongamos.
En la carta de la imagen debió decir:
Montevideo, 9 de mayo de 2023
Hablemos ahora del saludo. En contextos con algún grado de formalidad lo más común es usar «Estimado» o «Estimada» (o sus variantes en plural). Si el contexto es informal, podemos saludar con un hola.
Estimada Gladys C. Olivera:
Hola, Ana:
¿Ves la coma ahí? Cuando pongo «Hola» debe ir coma entre esa palabra y el nombre o tratamiento que vaya después, pues en ese caso estamos ante un vocativo.
Hola, Gonzalo:
Hola, mi amor:
Dice la Ortografía: «Se emplean dos puntos tras las fórmulas de saludo en el encabezamiento de cartas y documentos». Agrega que la palabra que sigue a los dos puntos —y que inicia el cuerpo de la carta— se escribe con inicial mayúscula y en renglón aparte.
Querido papá:
La última vez que nos vimos olvidé decirte algo importante.
La Ortografía explica que el uso de la coma en lugar de los dos puntos es una costumbre anglosajona y dice que «debe evitarse en español».
*Hola, Nando,
Te escribo porque necesito que me ayudes.
*Querido Alberto,
Voy a viajar a Chile el mes próximo y quisiera que nos encontremos.
La despedida
Si la despedida no tiene verbo, se escribe coma antes del nombre del remitente (aunque el uso del punto también se puede considerar válido):
Atentamente,
Julieta Vignolo
Un saludo,
Renata V. Martínez
Besos,
Miguel
Si la despedida es una oración completa, se cierra con punto:
De antemano, le agradezco su atención.
Cra. Ana Laura Martínez
Recuerden que las abreviaturas siempre tienen que ir con punto.
La firma
Si estás escribiendo desde un correo institucional, poné tu firma. Es muy desconcertante responder sin saber a qué persona nos dirigimos.
Si la firma es parte de la despedida, no se escribirá ningún signo:
Sin otro particular, le saluda atentamente Héctor Z. Martínez
Hay que evitar errores como el de la imagen. Allí se pone una coma y luego se sigue con mayúsculas. Eso es incorrecto.
Para la firma, los programas de correo ofrecen la posibilidad de crear un pie. Es buena idea porque ahorra tiempo y aporta prolijidad. En Gmail, hay que ir a la configuración general (la ruedita), pinchar en «Ver todos los ajustes» y después bajar hasta ver «Firma».
A mí me gusta el de mi amiga Majo, que tiene su profesión y el enlace a Telegram.
María José Caramés
Correctora editorial
Docente
Telegram
El libro de Estilo de la RAE da otros consejos: «Si se saluda a varias personas, a lo largo del mensaje habrá que mantener la referencia en plural o especificar adecuadamente a quién se hace referencia si solo se desea indicar algo a una de ellas».
«Pongo en copia». Si la persona (o personas) puestas en copia no están incluidas en el saludo, en alguna parte del correo es bueno advertir:
Estimada Raquel:
Después de haber hablado con Inés (a quien pongo en copia) sobre su licencia …
Ojo al responder. Hay que chequear a quién se está respondiendo. Y cuando respondemos la dinámica es otra. Dice el Libro de estilo: «En cadenas de correos, en las que se suceden las respuestas es admisible, incluso en un contexto formal, prescindir de la estructura epistolar completa».
Mejor cortos. Aunque no hay un límite en la extensión, lo aconsejable es que los correos sean cortos y que el contenido esté distribuido en párrafos cortos. Para las cartas, lo mismo.
El asunto es fundamental. Tiene que permitir que el destinatario se haga una idea clara del contenido del correo. No es necesario cerrarlo con punto, pero sí debe empezar, en principio, con mayúscula.
Adjuntos. Si el correo tiene adjuntos, es conveniente advertirlo de alguna forma en el texto.
Con estos consejos, muy señores míos, me despido. No sin antes decirles que si le preguntan sobre estos temas al Chat GPT, las respuestas por ahora no son buenas. Al menos las que me dio a mí. Mientras él mejora, mejoremos nosotros también.
María Eugenia
Productos Relacionados
También podría interesarte
Se termina el año y nuestras consultoras en el buen uso de la lengua proponen una limpieza. Arremetamos contra los excesos, sugiere María Eugenia Martínez. He aquí la propuesta: «agarrar cada palabra de nuestros textos (pueden usar unas manitos imaginarias), llevarla al pecho y preguntarnos: ¿la necesito?».
Llegó la hora de «Cuestión de palabras», la columna que soluciona la vida de mucha gente (al menos en lo que al uso del lenguaje se refiere). En esta entrega, María Eugenia Martínez desmenuza ciertos verbos demasiado sofisticados, pretenciosos, como «poseer». Aquel de ustedes que esté libre de pecado...
Sí, así como está escrito: rebién, relinda, superbarato, requeterrico (sí, todo junto). María Eugenia Martínez pone a los prefijos, esos afijos al principio de las palabras, bajo la lupa. Y nos hace recomendaciones esenciales a la hora de escribirlos, a pesar de que no tienen por qué gustarnos.
Siglemos.
A partir de anécdotas, Silvana Tanzi y María Eugenia Martínez construyen «Cuestión de palabras», un espacio dedicado a la reflexión lingüística para aprender a escribir correctamente.
Si tienen dudas que puedan resolverse en esta columna, pueden escribir a cuestiondepalabras@escaramuza.com.uy.
Jugar a cojugar. A partir de anécdotas, Silvana Tanzi y María Eugenia Martínez construyen «Cuestión de palabras», un espacio dedicado a la reflexión lingüística para aprender a escribir correctamente.
Si tienen dudas que puedan resolverse en esta columna, pueden escribir a cuestiondepalabras@escaramuza.com.uy.