El producto fue agregado correctamente
Filosofía contemporánea

«Cabalgar sobre la dinámica del desastre»: Bifo y los paisajes del futuro

Por Facundo Rojí Sanseviero / Miércoles 20 de julio de 2022

Son varios los libros de Franco «Bifo» Berardi que se consiguen en español. La editorial Caja Negra, en particular, ha hecho una campaña por traducir y divulgar el pensamiento de este filósofo y activista italiano. Facu reseña El tercer inconsciente (Caja Negra, 2022) en un contexto de «extinción sobre los hombros».

El pasado cinco de junio se conmemoró el día Mundial del Medio Ambiente. A propósito de esto, recomiendo leer el artículo del amigo de la casa, Eduardo Gudynas, experto en temas ambientales y defensor de la naturaleza, texto en el que cuestiona el mito del crecimiento perpetuo, tan arraigado en nuestra cultura.

En marzo del 1972, cuenta Eduardo, se publicó el libro The Limits to Growth (Los límites del crecimiento, en español, editado por Fondo de Cultura Económica), en el que un grupo de renombrados investigadores, con la mejor tecnología posible aplicada en esos años, establecían las consecuencias futuras derivadas del modelo de acumulación y extracción capitalista. Es decir, se trataba de la advertencia de una parte del mundo científico de la época que avizoraba en el horizonte el posible colapso civilizatorio alrededor del año 2100. 

Malas y tristes noticias: nos adelantamos drásticamente y ya habitamos ese colapso. Si algo faltaba para abonar la teoría de la debacle, una pandemia, conflictos bélicos varios, crisis energética y alimentaria, acrecientan el agotamiento de nuestras maneras de organizar la vida, y la muerte, ya que nos hemos perfeccionado en autodestruirnos como especie. Con el fin apocalíptico en el horizonte, Franco «Bifo» Berardi, filósofo y activista italiano, intenta explicarnos en su libro El tercer inconsciente (Trad. Tadeo Lima. Caja Negra, 2022) el proceso de desmoronamiento provocado por el capitalismo digital, acelerado con la aparición de la pandemia. Según Bifo, estamos habitando un umbral histórico, entendido este como el pasaje de la luz a la oscuridad, aunque, el italiano nos aclara, también puede ser un pasaje de la oscuridad a la luz. 

Portada de El tercer inconsciente (Caja Negra, 2022).

Berardi hace de la filosofía, el psicoanálisis y la poesía (como portadora de nuevas sensibilidades) sus herramientas para intentar buscar explicaciones y salidas al colapso, aclarando, de tanto en tanto a lo largo del texto, que se trata de una forma personalísima de observación. Bifo advierte también sobre la necesidad de redefinir todo desde el caos actual y el agotamiento como punto de partida de la reflexión. Para decirlo más claro: o repensamos las formas de existir desde la imaginación, la solidaridad y la cooperación, o seguimos barranca abajo hasta el fin.

El libro está estructurado en tres partes. En la primera, denominada «En el umbral», Bifo describe los efectos de la aparición del coronavirus en «en el espacio de la sensibilidad y la imaginación colectiva»; en la segunda parte, titulada «La psicoesfera inminente», teoriza sobre las distintas tendencias que se encuentran en la mutación psicológica en curso dado que se ven afectadas «las esferas de la sexualidad, la proxemia social y el deseo»; y en la tercera, y última parte, titulada «Devenir nada», el autor describe, desde el presente, lo que observa del mundo: una población avejentada, agotada en términos de recursos físicos y nerviosos, con la extinción casi sobre nuestros hombros, para la que «solo un nuevo horizonte de imaginación sería capaz de disipar esta probabilidad». 

Una de las características más interesantes de la propuesta de Bifo en este ensayo filosófico/social, es el uso que realiza del inconsciente como modelo explicativo del devenir humano en el mundo. A Berardi le interesa explorar y describir «la psicoesfera social», lo que, en términos de Jung, se asemeja al inconsciente colectivo, o sea, aquello que se encuentra más allá de la consciencia de los seres humanos, pero que al mismo tiempo es común a la experiencia que tienen estos. Dado que el inconsciente en términos psicoanalíticos es una instancia sin espacio, sin tiempo, sin lógica, sin antes y después, es imposible escribir sobre la historia del inconsciente. Entonces, la idea es «develar la forma que adopta el inconsciente en el medioambiente mental de la modernidad tardía».

Esta forma de comprender lo humano y lo social fue inaugurada por Freud y sus primeras conceptualizaciones sobre el aparato psíquico, en las que aparecen las tres instancias denominadas consciente, preconsciente e inconsciente. De alguna manera, este primer inconsciente representa «el lado oscuro del armazón bien ordenado del progreso racional». En el libro El malestar en la cultura, Freud da forma a la neurosis como la patología predominante a comienzos del siglo XX, producida por la exigencia social y normalizadora que niega el deseo y reprime la pulsión a cambio de «entrar en la Cultura», en definitiva, la aparición de la «forma burguesa» de la normalidad en desmedro de la animalidad, lo instintivo.

Siguiendo con esta antihistoria del inconsciente, Bifo destaca los cambios en los últimos años del siglo XX, cuando comienzan los procesos de globalización cultural a través de la aceleración de la información con el advenimiento de Internet y cómo esto comprometió la represión del deseo y el modelo psicopatológico neurótico. Eso daría comienzo a un segundo momento del inconsciente—transformación que fue intuida por Deleuze y Guattari en su monumental libro El Anti-Edipo. Según Berardi «el libro marcó el pasaje del estructuralismo al pensamiento creativo-rizomático, pero también abrió conceptualmente la caja de Pandora del deseo, anticipando la hipermovilización neoliberal de la energía del deseo en tanto separada del placer». Para este momento, el inconsciente deja de ser esa especie de depósito de las experiencias reprimidas, no deseadas, para pasar a concebirse como un laboratorio en donde confluyen fuerzas imaginativas, creativas que pueden habilitar nuevas posibilidades de vida. En este segundo momento del inconsciente, en el desacople entre el deseo y el placer, el deseo es dirigido, según el régimen del capitalismo neoliberal, al consumo, la competencia y el constante crecimiento económico, mientras que el placer es postergado. Según el italiano, el «entero sistema de medios de comunicación ha sido utilizado para expandir las promesas de felicidad y disfrute, pero esta aceleración del flujo de información, ha sobrecargado la atención humana». Esto provoca la imposibilidad y la postergación del placer y, por lo tanto, se reconfigura un nuevo régimen psicopatológico caracterizado por el pánico, los trastornos de la atención, la depresión y, por último, la psicosis.

Cabe recordar que este libro fue escrito por Bifo durante la fase más extrema del confinamiento europeo, durante el año 2020. En este contexto es que el autor italiano nos cuenta que «algo está cambiando en la esfera magmática del inconsciente, estamos atravesando un umbral, accediendo a una tercera era de la psicoesfera, a la tercera configuración del Inconsciente». Según el autor, la tercera etapa del inconsciente aún depende de lo que seamos capaces de realizar como especie, ya que es una disputa permanente y aún puede ser moldeado por «nuestra conciencia, nuestra acción política, por la imaginación poética y por la actividad terapéutica». 

Si bien hay ciertas esperanzas, al menos eso quiero creer, ya se pueden destacar algunas características de este nuevo inconsciente. La principal es el agotamiento a todo nivel: de los recursos naturales del planeta y de los recursos físicos humanos, el agotamiento de nosotros mismos, nuestra cotidianidad colapsada en la avasallante precariedad de la vida. El mañana prometedor del progreso económico y social de principios de siglo XX ha dado paso al horizonte cada vez más firme de la extinción, otra de las nuevas características de esta nueva psicoesfera, en tanto se acabaron las promesas del avance infinito de la humanidad. Y, tal vez, la característica más terrorífica de todas es la que el aislamiento y el distanciamiento han abonado: estamos tendiendo hacia la inmunidad emocional, evitamos empatizar para así ahorrarnos sufrimiento, fenómeno que Bifo define como una especie de autismo, una «alexitimia psicosocial» (incapacidad de identificar, reconocer, nombrar o describir las emociones o los sentimientos).

El filósofo nos advierte que «cualquier retorno al mundo normal parece imposible, ya que estamos dando el salto hacia una dimensión en la que el peligro pandémico se convierte en el núcleo de la economía y el orden político».

¿Seremos capaces de revertir el horizonte, tan próximo como nunca antes, de la extinción? ¿Bastará la política, la poesía, la militancia, la terapéutica para revertir, ralentizar, el fin? El escritor reflexiona sobre dos modelos posibles. O bien se refuerza el sistema tecnototalitario capitalista por medio de la violencia y la hiperexplotacion; o bien la actividad humana (con la imaginación como estandarte) nos emancipará de las abstracciones del capital y emergerá una sociedad basada en la igualdad y la utilidad.

Más allá del sentimiento de desolación que sobrevuela todo el libro, Berardi invita a repensarnos como humanidad a todo nivel, a desarmar lo construido hasta aquí, a aprender a «cabalgar sobre la dinámica del desastre» para encontrar alternativas posibles. Repensar los vínculos, los espacios laborales, las formas de consumir: la mirada revolucionaria debe filtrarse por cada rincón de existencia. Como dice el filósofo japonés Sabu Kosho, vamos hacia «la descomposición del Mundo para el redescubrimiento de la Tierra», si es que llegamos.

Productos Relacionados

También podría interesarte

×
Aceptar
×
Seguir comprando
Finalizar compra
0 item(s) agregado tu carrito
MUTMA
Continuar
CHECKOUT
×
Se va a agregar 1 ítem a tu carrito
¿Es para un colectivo?
No
Aceptar