Es Licenciada en Letras por la Universidad de Buenos Aires y cursó estudios de posgrado en la Universidad de Nueva York. Coordina talleres de poesía y traducción y trabaja como traductora para diversas editoriales. Escribe para chicos y para grandes. Sus últimos libros de poesía son Lugares donde una no está y Traducción de la ruta. Recientemente publicó Se vive y se traduce (Entropía), una especie de diario-ensayo sobre la vida como traductora. Algunos de sus libros para chicas y chicos son Veo Veo, Dime cómo vuelas, Los entusiasmos, Tengo un hijo alto, Mi tortugo (fue vernos y querernos) y Justo antes de dormir. Tradujo, entre muchos otros, a Leonard Cohen, David Markson y Anne Tyler.
Notas de Laura Wittner
Laura Wittner escribe sobre María Cristina Ramos, la escritora y editora argentina dedicada a la literatura infantil. Surgen así notas sobre el arte mágico de hacer cosas con las palabras: «las elige especialmente para cada ocasión —vos sí, vos no, vos hoy sí, vos hoy no—, las ordena como nunca antes las ordenó nadie, a lo largo de partituras amorosas».
En la biblioteca de Laura Wittner hay varios objetos emparentados. Entre ellos, está el libro Open House for Butterflies, de Ruth Krauss y Maurice Sendak, inédito en castellano. «El humor que propone está siempre enrarecido. Las palabras están un poquito corridas de lugar, o deformadas; las nociones flirtean con el absurdo o, diríamos ahora, con la incorrección política» escribe Laura y, de paso, lo empieza a traducir.
La traductora y poeta Laura Wittner nos trae dos poemas de James Schuyler, de la New York School, inéditos en castellano. Como explica: «Cuando le muestro a alguien un poema de James Schuyler tiendo a dar explicaciones; casi a justificarme, a justificarlo, a defenderlo de antemano: parece tan simple que puede desconcertar, solo describe el mundo desde un punto fijo, o describe su mente desde un punto fijo».